A21

El A21 es uno de esos bares que tienen un algo especial. Este bar, que ha recibido numerosas alabanzas por parte de críticos especializados (fue nombrado mejor bar del mundo en 2009 por la página web worldsbestbars), es uno de los más exclusivos de Helsinki. Basta con decir que no se puede entrar alegremente como en cualquier otro bar, sino que hay que llamar a un timbre para que el camarero te abra la puerta. A pesar de todo, es un lugar donde todo el mundo es bien recibido y se puede disfrutar de su ambiente por un precio caro, pero no excesivo. Eso sí, es conveniente llamar antes de ir para asegurarse de que tendrás sitio, ya que suele llenarse los fines de semana. A cambio, podrás disfrutar de un rato agradable sin masificación, en unos sofás privados y con una música que te permite conversar.

Mejor reservar antes de ir.

La simplicidad es la base, desde el minimalismo de su elegante decoración hasta el propio nombre del bar, que procede simplemente del nombre y número de la calle en donde se encuentra (Annankatu 21), dejando la sofisticación a la extensa carta de elaborados cócteles. Y es que este es su punto fuerte. El incontable número de cócteles disponibles provoca una gran indecisión a la hora de elegir, por lo que el consejo de los agradables camareros puede ser de gran ayuda para tomar la decisión. Las bebidas son preparadas de forma muy profesional y el resultado no puede ser más satisfactorio.

Cócteles.

Como experiencias alternativas, puedes probar a reservar la sala del fondo del bar (consumo mínimo 300€) y pedir una de esas botellas de champán de 1000€, o ir al restaurante que tienen en una calle perpendicular a probar un menú compuesto por una combinación de comida y cócteles.

Lonkero

El lonkero es una bebida alcohólica original y típica de Finlandia. Consiste en una mezcla de ginebra y pomelo con una graduación similar a la cerveza. Existen diferentes variedades de esta bebida, pero la tradicional contiene un 5.5% de alcohol y sólo se puede comprar en las tiendas Alko. Las versiones de menor graduación sí que se pueden comprar en los supermercados.

Lonkero.

Este año se cumple el 60 aniversario de su invención. Fue en 1952, año en el que se celebraron los Juegos Olímpicos en Helsinki, cuando la empresa Hartwall ideó esta bebida ya preparada, para solucionar la carga de trabajo de los camareros a la hora de atender a las masas de visitantes. En ese año se crearon dos sabores, el que ya os hemos comentado de ginebra y pomelo y otro llamado Brandy Lonkero (Brandy con refresco con sabor a frutas) que fue retirado en los años setenta (aunque se ha vuelto a comercializar para la celebración del 60 aniversario).

Autobús conmemorativo del 60 aniversario del Lonkero.

El éxito de esta bebida fue tal, que se continuó fabricando una vez acabados los Juegos Olímpicos y actualmente es una de las bebidas preferidas por los finlandeses. Hoy en día existen varias marcas y sabores derivados, como el de arándano o el Mojito Lonkero.

Lonkero en la terraza de la discoteca Tiger.

Así que si os pasáis por Finlandia y veis mucha gente bebiendo algo que parece limonada por el color, comprenderéis que lo más seguro es que estén bebiendo un Lonkero.

Vuelta a Helsinki

Hoy os traemos la segunda parte del viaje a España que publicamos hace unos días. Se trata del viaje de vuelta a Helsinki desde Zaragoza. Este viaje tiene una ruta diferente a la ida, ya que hay una escala en Bérgamo (Italia), con noche incluida, y llegada a Tampere antes del destino final. Aquí os dejamos el diario del viaje (las horas corresponden al horario finlandés).

20:45: Llegada al aeropuerto de Zaragoza. Despedida de la familia y de los 45°C.
21:20: Pasamos el control de seguridad del aeropuerto y toca esperar detrás de la cinta porque parece que ya hay que esperar hasta para sentarse en los bancos del aeropuerto.
21:40: Abren la cinta y ahora ya se puede hacer la cola en la puerta de embarque. Seguimos sin entender el motivo de la anterior espera.
22:15: Todo el pasaje ha embarcado (antes de hora), pero el piloto avisa de que hay que esperar debido al tráfico aéreo. ¡Sólo volamos 63 pasajeros!
22:30: El avión despega con cinco minutos de adelanto y con algo de turbulencias.
23:30: Sobrevolamos la costa ¿francesa? por la noche. Unas vistas espectaculares. Por primera vez en nuestras vidas vemos fuegos artificiales desde el cielo.
24:00: Llegada a Bérgamo con veinte minutos de adelanto (es lo que tiene el sobredimensionar el tiempo de vuelo por parte de la compañía aérea).
00:20: Llegada al hotel Winter Garden de Bérgamo. Muy buen hotel. Hora de dormir.

Zonas comunes del hotel.

08:30: A levantarse y a darse una ducha de hidromasaje.
09:00: Desayuno con vistas a la ciudad alta de Bérgamo. Después del desayuno, check-out y en marcha para una visita mañanera a Bérgamo.
11:30: Café en una terraza de la ciudad alta. Palomas asesinas por doquier, normal, el camarero no para de echar migas de croissant al suelo. La parsimonia de los camareros italianos es legendaria.

La ciudad alta de Bérgamo.

12:30: Llegada al aeropuerto de Bérgamo. Las pistas de los aeropuertos se parecen cada día más a las estaciones de autobuses, llegará un día en el que habrá que mirar el letrero luminoso encima del avión para saber cuál es el tuyo.
14:20: Embarque en el avión con sorpresa, ¡la tripulación es española! En esta ocasión el avión tiene el 100% de ocupación.
17:30: Llegada a Tampere. Aunque la terminal 2 es algo más grande que la de Turku (poco más, no os llevéis a engaño), el mobiliario parece sacado de "Cuéntame". Dada la baja frecuencia del autobús urbano (el número 61) en domingo, nos toca coger el autobús fletado por la aerolínea (por un precio no tan módico como el urbano). En la calle se agradece el volver a estar por debajo de los 20°C.

Plaza central de Tampere.

20:07: Después de una visita rápida a Tampere (ciudad de la que os hablaremos en otra entrada), salimos en tren con destino Helsinki. En el tren pasa el carrito de los cafés y refrescos (incluso cervezas), como si de un avión se tratase. Por el camino, preciosos paisajes, como la magnífica vista del castillo de Hämeenlinna.

Castillo de Hämeenlinna.

21:52: Llegada a la estación central. Tranvía hasta casa, cena y hora de dormir.

Primer aniversario de Viviendo Suomi

Hoy estamos de celebración en Viviendo Suomi, ya que se cumple el primer año de existencia del blog. Un año después y tras más de tres mil visitas, seguimos tan entusiasmados con el proyecto como el primer día. Vuestro apoyo mediante las visitas, los comentarios de las entradas y las conversaciones que hemos tenido con muchos de vosotros nos han dado una gran satisfacción y mucho ánimo para continuar contando nuestras historias.

Además, queremos aprovechar esta celebración para presentaros un nuevo proyecto asociado al blog. Se trata de una página web que hemos creado (con poco contenido por el momento, iremos incorporando más contenido paulatinamente) en la que os contaremos más vivencias, pero en este caso relativas a los viajes que realicemos desde Finlandia. La página se llama, como no podía ser de otra forma, Viajando desde Suomi. ¡Esperemos que os guste!

¡Gracias por seguir con nosotros!

Playas

El verano se puede disfrutar de muchas formas. En Helsinki, con tantos kilómetros de costa, no podía faltar uno de los elementos principales del verano: la playa. Y es que, aunque no abundan como en la costa española, varias playas permiten darse un baño en las aguas del mar Báltico. Hay un par de diferencias entre las playas españolas y las finlandesas. La primera de ellas, es la ausencia completa de olas. Así que si eres de l@s que te gusta entrar al mar saltando las olas o tenías pensado hacer surf, no has elegido buen lugar para ello. La segunda diferencia que se aprecia rápidamente es que el agua no está salada. Así que, juntando ambas características, puede llegar a dar la sensación de estar bañándose en un lago.

Vamos a hablaros de forma breve de tres de las muchas playas de Helsinki:

Hietaniemi

También llamada Hietsu por los locales, es, probablemente, la playa más popular de Helsinki. Situada prácticamente en el centro de la ciudad, es una larga playa de arena con varias zonas para jugar a voleibol y un gran número de usuarios en los meses de verano. También tiene otros servicios básicos, como puestos de helados o baños públicos. A pesar de ser la más popular, uno no siente el agobio de playas masificadas como sucede en muchos lugares de España. Tiene ese punto de gente que no te hace sentir solo y que, a la vez, no agobia y te deja desconectar del bullicio. Se puede llegar fácilmente a pie o, si se prefiere, con el autobús 55A que se puede coger, entre otros sitios, en la estación central de trenes y en el centro comercial Kamppi. Esta playa fue nuestra elección para celebrar el Juhannus de este año.

Playa de Hietaniemi.

Playa de Pihlajasaari

Ya os hemos hablado de la isla de Pihlajasaari anteriormente en este blog. Esta playa es también muy popular entre los locales, ya que la isla es un lugar perfecto para escaparse de la ciudad. La playa, también de arena, no es tan grande como la de Hietaniemi, pero es bastante amplia, ya que cubre casi la mitad de la costa de la isla, y cuenta con unos coloridos cambiadores de ropa.

Playa de Pihlajasaari.

Playa de Suomenlinna

A pesar de lo grande de la isla, la playa de Suomenlinna es la más pequeña (realmente pequeña) de las que os vamos a hablar. No obstante, pese a que se pudiera pensar lo contrario, no deja de estar abarrotada los días de calor, gracias, en gran medida, a la popularidad de la isla. Debido a su reducido tamaño (la zona de la arena), las toallas de los bañistas se extienden a lo largo de las rocas que se encuentran a ambos lados de la playa.

Vista panorámica de la playa de Suomenlinna.

Ahora que el buen tiempo ha llegado a Helsinki (a días), no hay nada mejor que dejarse caer por una de estas playas y relajarse. ¿Cuál es tu favorita?